martes, 26 de septiembre de 2017

Un martes cualquiera

Estaba pensando, así de buena mañana, que esto de hacerse mayor tiene muchas ventajas. Y no, no me refiero a las arrugas, los kilos y a esa rodilla que a veces me entran ganas de amputar. No es eso. La madurez, cumplir años, tiene la ventaja de lo que has aprendido, de lo que sabes, de lo que has hecho por ti misma. Tiene la ventaja de que hoy eres más la persona que quieres ser.



Claro que para algunos eso  de hacerse mayor tiene que ser terrible. Me refiero a cumplir años y no haber evolucionado nada de nada; pensar igual que cuando tenían catorce años, o dieciocho, creer que las cosas, los pensamientos, las personas... son entes inamovibles y que todo es como era hace diez, veinte, treinta años.



Yo, al menos, creo que en estos años he cambiado, he evolucionado, y me he ido convirtiendo en una persona que me gusta más que la que era con veinte años; más joven, sí, pero bastante más tonta. He aprendido muchas cosas, he cambiado mi forma de pensar en muchos aspectos, y considero que sé más que hace, no sé, tan solo cinco años.




Me encanta saber, sin arrepentimientos, que con mis conocimientos actuales, no habría cometido muchos actos de mi pasado, y habría perpetrado otros muy diferentes. Me gusta mirar hacia mis antiguas preocupaciones con la suficiencia de quien las ha superado.




Y también, como ya tengo unos cuantos años y sé que en el pasado me he equivocado, he hecho cosas mal y, sobre todo, me he preocupado en exceso por muchos temas que no tenían solución o cuya solución no estaba en mi mano, afronto lo venidero pensando en que dentro de un tiempo me pasará lo mismo con mi actualidad. Pensaré que no era para tanto, que todo salió bien, o salió como tenía que salir, que mi yo de 44 no sabía lo que se hacía; y me alegraré de que mi yo de ochenta años sepa mucho más, y que haya cambiado a mejor (o al menos eso espero).


18 comentarios:

  1. A eso lo llamo yo aprender a ir con el "flow". Yo ni siquiera soy la misma persona que hace diez años, siento que he vivido unas cuantas vidas desde entonces. Es lo bueno de que te hayan pasado muuchas cosas, muy joven, las superas y aprendes. Yo soy infinitamente más feliz ahora, porque sé hacer algo que es muy difícil, centrarme en el momento que estoy viviendo y punto, sin preocuparte por cuestiones futuras ni juzgarme por el pasado y sabiendo que hay que dejar fluir y adaptarse a lo que no podemos cambiar. Además, cuando veo que se me viene un problema gordo, pienso "Bueno...eso es un problema para Aroa del futuro" y esa noche me acuesto a dormir tranquila sin darle más vueltas. A mi yo del pasado con un insomnio bestial le hubiera sido imposible hacerlo.
    Fuerte rollo te he soltado jajajaja. Y eso que estamos todavía a martes. Mil besos.

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    1. Nos queda mucho que aprender, pero es verdad que vamos dejándonos llevar un poco más, yo antes me rebelaba contra lo que no podía controlar y ahora lo hago mucho menos.

      Besos.

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  2. Genial reflexión, y geniales las fotos. Yo también quiero ser una señora de 80 que haya mejorado con los años.

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  3. Precioso, Ro. Cuán cierto es eso de que lo que tenemos y sabemos lo hemos hecho por nosotras mismas, pero también que si volviéramos atrás muchas cosas no las haríamos. Eso es aprender, rectificar, corregir...
    Dentro de un tiempo, lo que hoy nos agobia será una simple anécdota. Así que...preocupémonos de lo verdaderamente importante (también lo dice mi abuela con 94 años recién cumplidos).
    Un beso

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  4. A mi me gusta pensar que estamos en constante evolución

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    1. Sí, pero reconoce que mucha gente no evoluciona nada de nada, y yo me siento orgullosa de no ser de esos.

      BEsos.

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  5. Hace poco tuve la oportunidad de volver a mi yo de hace 20 años de manera muy efectiva (digamos que con una especie de cartas, unos recuerdos muy objetivos y descriptivos). No te haces idea de lo feliz que me hizo ver cómo había cambiado, para bien claro :)
    Mi yo de ahora ve las manías de las personas mayores, y eso es una de las cosas que intento cambiar de cara al futuro, el no dejarme atrapar por ellas.
    Y un detalle. Creo que una de las cosas que más te hace cambiar es el tener hijos. Por narices tienes que evolucionar, es evidente que no puedes tratar lo mismo el "egoísmo" de un niño de tres años que la falta de compromiso de uno de quince.

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    1. También tengo que aplicarme lo que dices, intentar no coger demasiadas manías, porque es cierto que nos vamos volviendo raros.

      Besos.

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  6. Me gusta tu reflexión. Y me gusta la mujer que eres ;)

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    1. Gracias. A mí también me gusta la mujer que soy. Y con unos cuantos años menos no me gustaba tanto.

      BEsos.

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  7. Interesante reflexión... y totalmente de acuerdo con ella.
    Creo que la mejor edad es la que se tiene.
    Besosss

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    1. Sí, cierto, aunque a veces no estemos contentos con lo que tenemos o con el momento en el que estamos.

      Besos.

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  8. Siento algo muy parecido a lo que dices (y somos casi de la misma quinta...)

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  9. sí, yo pienso como tú. no sé si me cambiaría por mi yo de 20 años. qué ingenua era entonces.

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    1. Cambiaría mi maltrecho cuerpo por el de entonces, pero el resto no, ni hablar.

      BEsos.

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